La idea de crear, en el centro de Berlín,un Lugar de Silencio – abierto para todos e independiente de toda religión – se originó a fines de 1988 en la parte este de la entonces todavía dividida ciudad. Después de la reunificación, en 1990, esta idea fascinó igualmente a personas en la parte oeste de la ciudad y al poco tiempo se formó un pequeño grupo iniciador de berlineses. El grupo tuvo la intención de crear en el centro de Berlín dicho lugar, en un edificio apropiado y situado lo más cerca posible de la antigua frontera entre los bloques ideológicos enemigos. Sirvió de ejemplo la sala de meditación instalada en 1954 por el secretario general de la O.N.U., Dag Hammarskjöld, para sus colaboradores en el edificio de las Naciones Unidas en Nueva York.
En 1993, el grupo iniciador se constituyó como “Grupo patrocinador del Lugar de Silencio en Berlín, asociación registrada”, bajo el patrocinio de la entonces presidenta de la Cámara de Diputados de Berlín, Dra. Hanna-Renate Laurien. El día 27 de octubre de 1994, el grupo patrocinador apoyado por el Senado de Berlín inauguró el Lugar de Silencio en la Puerta de Brandeburgo.
Según la idea de los miembros del grupo patrocinador el Lugar de Silencio tiene dos objetivos: Por un lado – este lugar debe ofrecer la ocasión a cada ser humano –independiente de su origen, color de piel, ideología, religión y constitución física – para entrar y tomar asiento en silencio con
el fin de relajarse y olvidarse del estrés de la gran ciudad y de recobrar fuerzas nuevas para la vida diaria. Este lugar histórico también es adecuado para pensar en tiempos dolorosos del pasado así como en tiempos más alentadores, para meditar o rezar y para dar las gracias por todo lo regalado en los últimos años. Por otro lado – visto que todos están invitados a una permanencia silenciosa y pacífica – los miembros del grupo patrocinador le atribuyen a este lugar un significado simbólico: El Lugar de Silencio deberá ser una constante exhortación a la hermandad y
la tolerancia entre los hombres y una constante advertencia contra la violencia y la xenofobia – es decir un paso pequeño hacia la paz, tal como lo expresa la oración de las Naciones Unidas:
“Señor, nuestro planeta Tierra es sólo un astro en el gran universo. Está en nosotros hacer que en él sus habitantes no sean más atormentados por guerras, no les torture el hambre y el miedo, no sean separados insensatamente por su raza, color de piel o ideología. Danos valor y energía para empezar ya desde ahora con ese trabajo para que nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos lleven algún día con orgullo el nombre ‘ser humano’. ”
El Lugar de Silencio no es dedicado a ninguna ideología o religión – cada uno puede entrar sin la preocupación de ser acaparado por algún interés especial, por algún programa o una institución. Con eso no se está contradiciendo que los miembros del grupo patrocinador así como todos
aquellos que cuidan desinteresadamente el lugar provienen de distintas religiones, sea de las iglesias cristianas, sea del judaísmo, de la religión musulmana, del budismo, del hinduismo, del behaísmo o de la religión Sij. Todos ellos – independiente de su orígen ideológico – concuerdan en la idea de que en el centro de Berlin debe haber un lugar de encuentro en silencio por encima de todas las diferencias de los hombres. Renunciando a cualquier símbolo religioso, ideológico o político, el arreglo neutral y sencillo del Lugar de Silencio corresponde a su carácter independiente de toda confesión. La única decoración es un tapiz, confeccionado por la Sra. Ritta Hager de Budapest, en el cual es diseñado simbólicamente la luz penetrando la obscuridad. En el vestíbulo hay una pared azul con la palabra “Silencio”, creado por Paul Corazolla de Berlín, mientras en el pasillo, antes de entrar en el Lugar de Silencio, un relieve de Franz Prentke de Berlín hace juego. El propósito de la promoción de la paz se expresa de manera muy especial en un cartel de paz así como en un collage dedicado al tema de la tolerancia, lo último realizado por
escolares berlineses.
La Puerta de Brandeburgo: Es de especial significado que el Lugar de Silencio haya sido establecido en la Puerta de Brandeburgo. Hace 200 años, esta puerta fue concebida – por el arquitecto Langhans – como puerta de la paz e inclusive se llamó así durante algún tiempo. Según los planes de Langhans la puerta debería tener una escultura que representara el
triunfo de la paz. Fue colocada la cuadriga de Schadow, representando la entrada de la diosa de la paz Eirene en la ciudad. Bajo la cuadriga se encuentra un gran relieve ático donde aparece la diosa como mensajera de la paz. La escultura de Marte, en el ala lateral sur, también es dedicada a la paz ya que Marte enfunda su espada. En el transcurso de su historia – sobre todo
durante el régimen nazi – se hizo mal uso político de la Puerta de Brandeburgo. Posteriormente,
durante varias décadas ella ha sido símbolo de la ciudad y del mundo divididos. Con la caída del muro de Berlín, la Puerta de Brandeburgo llegó a ser el símbolo de un futuro común pacífico para
Alemania y toda Europa. El Lugar de Silencio retomando la idea de la puerta de la paz coincide así con el espíritu del sitio.
El Lugar de Silencio como sitio de meditación, de hermandad y de amor por la paz redunda – así lo esperamos – en honor y prosperidad de la ciudad y de su monumento característico.
Förderkreis Raum der Stille
in Berlin e.V.
e-mail: raum-der-stille@berlin.de
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