«Tenemos, dicen, cinco sentidos. Imagínate que Dios nos diera un sexto sentido: lo estrenaríamos con gozo y sorpresa, como si fuera, por ejemplo, captar las ondas infrarrojas o ultravioletas. El ir descalzo es un nuevo canal de percepción del mundo, volver a captar ondas, radiaciones,… Y el palpar con las manos, a la vez que con los pies tocamos el suelo, es fuente enorme de sensaciones, contactos, conocimientos.» Este es uno de los fragmentos del folleto «Descalzos» de la colección Oasis. A través de sus páginas, presentamos una recopilación de algunos de los pensamientos que Alfredo Rubio de Castarlenas, transmitió sobre la descalcez, no solo con palabras sino con su vida. Pasó por este mundo «descalzo» del poder, de la ambición, de la vanidad.